EL ENEATIPO 4

Deja de compararte y serás feliz

Es una persona diferente, incomprendida, con una serie de profundas emociones que la hacen sufrir mientras que la hacen sentirse especial.

Esta personalidad se siente inferior a los demás, por lo que vive comparándose. Busca ser reconocida, para lo que suele disfrazarse de alguien especial, incomprendido y profundo. Quiere atención, sintiéndose único y diferente.

Seduce con DEBILIDAD, NECESIDAD, ROMANTICISMO

Hopeless Romantic" Pin | Michelle Branch

Lo que espera de ti:

Que la escuches cuando te hable de su mundo y de sus cosas, desde el principio al fin sin juzgar ni aconsejar. Que valores su forma de ser “especial”, estando por ella y mostrando interés sincero por sus cosas. Les gustan las personas interesantes, originales, que las traten de forma especial, sobre todo delante de la gente. Se sienten amadas si son tratadas de forma romántica.

Lo que no les gusta:

  • Los alardes, la chulería, las personas ostentosas.
  • La vulgaridad, la mediocridad y la ordinariez, los temas de conversación banales y vacíos.
  • No soportan sentirse abandonadas, ignoradas, cualquier desprecio o crítica es un atentado a su ya pobre autoestima.

Aspectos a tener en cuenta si tú eres un eneatipo 4

Lo que debes evitar:

  • La queja repetida, reclamar amor, tiempo, dedicación, de forma insistente.
  • El victimismo, culpabilizar al otro, responsabilizarlo de tu felicidad.
  • El alternar fases de acercamiento y afecto con otras de alejamiento emocional.
  • Poner un exceso de expectativas en la pareja.

Lo que puedes mejorar:

  • Interesarte por sus cosas, sin acabar siempre hablando de las tuyas.
  • Tu autoestima, si está contigo es porque te quiere, le gustas, por que vales.
  • Serena tus emociones, y muestra alegría y optimismo, sin necesitar motivos.
EL ENEATIPO 4 EN EL AMOR

El Eneatipo 4 siente que le falta algo importante que los demás tienen. Seguramente se sentirá muy interesado por algo imposible de conseguir o un sueño no cumplido. Esto puede desanimar mucho a la pareja de un Cuatro viendo cómo esa felicidad o satisfacción no llega nunca. La relación es compleja por es sufrimiento y dramatismo que imprime la pareja Cuatro. Sus relaciones son todo menos ordinarias. No son sentimientos comunes sino profundos, intensos. Parece que el momento de felicidad, álgido o trascendente está por llegar. Todavía no está en el momento presente.

Hay una constante idealización romántica de las relaciones, recordando el pasado con melancolía y centrándose en las experiencias que están por venir.

Son muy sensibles a los estados emocionales de sus parejas y un gran apoyo en los momentos de sufrimiento.

Dado que la conexión es el centro de su existencia, los Cuatro exigirán la una presencia emocional completa a su pareja. La idea de ser abandonados les genera gran tensión.

En algunas ocasiones tienen la costumbre de distanciarse cuando una persona les quiere y piden cariño cuando la persona se aleja, un comportamiento de “tira y afloja”. Y siempre se cuestionan si la relación es auténtica o superficial. Por eso buscan una pareja que sea una base sólida, un pilar que soporte esos movimientos fluctuantes en la relación.

Una personalidad dotada de una sensibilidad extra, emocional e intensa, que muy a menudo se comporta de manera individualista, como si los demás le hicieran sentir mal con demasiada facilidad. En este exceso de sensibilidad pueden sentirse heridos fácilmente y posicionarse en un papel de víctima incomprendida, lo cual se puede traducir en quejas, lamentos y reproches.

Pueden ser bastante dramáticos, con un sentido trágico de la vida y una percepción de sí mismos como defectuosa. Creen que sufren más que los demás, que no es justo y que nadie es capaz de calmarles. Muchas veces encuentran consuelo y expresión de sus debacles emocionales en diferentes formas de arte, sobre todo artes plásticas donde pueden plasmar ese intenso mundo interior que les caracteriza. Por esto son personas muy creativas, que ponen su atención en los aspectos más estéticos, sensibles o delicados de las cosas, que saliendo de lo habitual, de lo de siempre, encuentran lo nuevo, lo que otros no ven.

Les gusta saberse diferentes de los demás, creen que son originales, que los demás se parecen demasiado, como algo ordinario o vulgar y pueden reforzar esa originalidad mediante diferentes indumentarias o manera de expresarse o comportarse, algo que de alguna manera construya una imagen de “yo soy único, puede que tú te creas mejor, pero solo eres uno más…”

Pueden ser grandes compañeros, que te comprenden y que son muy capaces de empatizar contigo, aunque otras veces necesitan ser escuchados, les gusta hablar de sí mismos, a veces demasiado, y esto provoca grandes frustraciones puesto que si no les atiendes tanto como esperan de ti, si les dejas a medias con su relato, concluyen que no te importan, que a nadie importan, y que su vida es, en el fondo, una tragedia.

Su “Pasión” es la Envidia, y trata de un impulso por compararse con todo aquel que tenga lo que no tienen, con todo aquel que se muestre más feliz que ellos, con todo aquel que le confirme que no han tenido suerte, que son menos y que no pueden disfrutar de la vida como los demás porque les ha faltado algo…

El eneatipo 4 se siente diferente, cree que los demás lo tienen más fácil en la vida y que pueden ser más felices, sin embargo de esa diferencia tratan de elaborar su identidad, como si pensaran “si, puede que tú tengas más suerte, pero yo soy especial”.

Esta identidad única y especial se apoya en una gran intensidad emocional, sienten muy sensiblemente sus emociones y con frecuencia las amplifican hasta verse absorbidos por ellas. Muchas veces ellos mismos ofrecen una imagen con algún elemento que les distinga, que nadie más lleve, dejando claro que no son como los demás…

TIPO  4 – ESFORZARSE POR SER ÚNICO

Marcar la diferencia: mostrase diferente de alguna manera y evitar la mediocridad. Se sienten únicos y especiales, y no se les complace fácilmente.

Los “yoes”: predominio de frases como yo , para mí, lo mío, tratar de ser el centro de la conversación.

Intensificar los estados de ánimo: amplifican lo que sienten a través de la pérdida, la fantasía, la conexión artística y las artes dramáticas.

ENVIDIA
  • La percepción de la pérdida: sentir que te falta algo que los demás tienen y que les permite ser felices.
  • La carencia y la búsqueda: creencia de que ese algo que te falta lo encontrarás un día y podrás ser feliz.
  • La comparación. Siempre salir perdiendo en la comparación, lo del otro siempre es mejor.
  • La “tara”: los demás ven mi defecto, por eso no se me tiene en cuenta y se me ignora.
COMPENSACIÓN
  • La melancolía: una forma de recordar que algo falta, una dulce tristeza basada en la percepción de la pérdida.
  • Exigencia: se esfuerza en ser mejor de lo que es y se culpa por no lograrlo. Si los demás me ven como soy no me querrán.
  • Negatividad: nunca seré feliz, no tengo lo que hace falta, y cada vez que algo parece ir bien siempre se estropea.
  • Romanticismo: tratar de llenar el vacío con las relaciones amorosas.
CONVIVENCIA
  • Rechazo de la mediocridad: desagrada lo vulgar, las conversaciones banales, las personas vulgares etc…
  • Modales y estilo: la estética es muy importante, vestir con clase y llevarlo con clase.
  • El drama: atracción por la vida dramática, se cuenta lo propio como una novela.
  • Victimización: nunca se está contenta del todo, siempre pasa algo o algo se pone en su contra.
  • Comprensión empática: facilidad para conectar con las emociones del otro, sabe escuchar y sabe comprender.
  • Sufrimiento, rabia: en la vida le ha tocado sufrir más que a los demás y eso no es justo, siempre hay a quien echarle la culpa.
  • El dolor como venganza: puede provocarse sufrimiento para culpar a alguien o hacerle sentir mal. “Estoy así por tu culpa”.
TRABAJO
  • Competitividad envidiosa: estará pendiente de si los demás reciben mejor trato que ella, no lleva bien el éxito de los otros.
  • Ser tenida en cuenta: espera poder tomar parte en las decisiones, que su opinión sea escuchada.
  • Dificultad en el equipo: tendencia individualista, reacia a comportarse como una más.
  • Creatividad: necesita poder expresar su arte de algún modo, trata de que su trabajo lleve su marca.
  • Trabajo emocional: se sienten atraídos por trabajos en los que puedan dedicarse a actividades emocionalmente intensas.
AMOR
  • El tira y afloja: alternan la intimidad y el afecto con fases de distanciamiento.
  • El príncipe azul: sueña con la persona que algún día llegará y la hará feliz para siempre.
  • Dependencia emocional: necesidad de romance, de sentir emociones amorosas, y miedo a ser abandonada.
  • Amor idealizado: rápido enamoramiento, se crean expectativas pronto y se pone el nivel muy alto.

SUBTIPOS DEL ENEATIPO 4

ENEATIPO 4 CONSERVACION

El eneatipo 4 conservación duda de su propio ser, teme el abandono y cree que merece ayuda, pero ha introyectado la envidia hacia sí mismo y la ha convertido en una autoexigencia devorante, y se exige a sí mismo mucho más que a los demás. Es muy duro consigo mismo, se juzga severamente y asume todas las culpas, y se impone un sistema de necesidades difícil de satisfacer, por lo que para compensar su sentimiento de carencia y poca valía, centra toda su energía en una exigencia de perfección exacerbada similar a la de un E1, y procura mejorar su autoconcepto mediante una actitud fuerte y tenaz, poniéndose muchas normas, esforzándose por ser ético, trabajador y responsable, y viviendo con una fuerte determinación. Y se le denomina de hecho “tenacidad”, porque lo distinguen el gran esfuerzo, la perseverancia, y la disciplina con los que intenta luchar y llegar más arriba, siendo el más fuerte, autónomo, menos emocional, más intelectual, menos introvertido, y el que menos se lamenta de los tres subtipos del E4.

Si bien los tres subtipos del E4 comparten un mismo patrón neurótico (determinado por el sufrimiento que les causa un sentimiento de carencia a nivel existencial, una mala autoimagen y una dependencia afectiva), y actúan en función de la envidia que nace de su incapacidad de poder conformarse con sus carencias, y que les lleva a compararse con los demás deseando lo que a los otros les hace aparentemente felices, son muy diferentes entre sí respecto a su manera de afrontar el dolor. Y mientras el subtipo social se queda en este último, y el sexual responde de forma agresiva, el subtipo conservación se distingue por la perseverancia y el esfuerzo con los que intenta mejorarse a sí mismo y superar las situaciones, para obtener el amor de los demás.

Los eneatipo 4 conservación sufren mucho, pero no quieren parecer débiles ni necesitados a los ojos de los demás, por lo que no exteriorizan su sufrimiento, ni manipulan a los otros con su estado emocional, sino que ante la frustración que les causa el hecho de creer que nadie les entiende y el de no sentirse dignos del amor que necesitan, hacen virtud de la resistencia, y del esfuerzo una pasión con la que hacer méritos y mejorarse. Son los “sufridos” de los tres subtipos del E4, que tragan y aguantan, no se quejan ni piden, evitan llorar ante los demás, y soportan el dolor en silencio, casi con una cierta actitud masoquista o adicción al sufrimiento, que idealizan, pues consideran que si se aguanta con entereza, dignifica y ennoblece.

Suelen cuidar bastante su imagen y temen la vulgaridad, pues como a todo E4 les gusta distinguirse del montón como seres un poco únicos para compensar su pésimo autoconcepto, y se esfuerzan en ser especiales siendo selectos mediante la apreciación de las buenas cosas, y también los más autocomplacientes del E4, que procuran apaciguar o compensar sus estados emocionales negativos de sufrimiento interno con caprichos y satisfacciones como objetos bellos, comida o sexo, y que tendentes al lujo y a la exclusividad, son incluso indulgentes con algunas malas prácticas.

Emocionalmente muy sensibles a los pequeños cambios de su entorno, muy intensos, y de estado anímico inconformista, pueden meterse en situaciones peligrosas de manera parecida al E6 sexual en su búsqueda de intensidad, y todo tiene un valor tan simbólico para ellos (hasta los propios objetos, que pueden llegar a relacionar con una sensación), que cualquier alteración les puede causar una respuesta emocional (y en ocasiones agresiva).

El eneatipo 4 conservación, en un estado de equilibrio, pueden aplicar su tenacidad para centrarse de manera muy resolutiva en la consecución de sus metas o en una causa. Son buenos gestores de su dinero y posesiones, y buenos observadores desde perspectivas distintas a las convencionales. Y pueden expresar asimismo, una gran sensibilidad estética. Pero presas de su neura, pueden asumir excesivos riesgos para cubrir el vacío emocional que sienten o para llamar la atención de los más cercanos, o esforzarse excesivamente en dar la imagen de un ser especial, o ser muy sensibles ante pequeñas molestias o críticas ajenas (o indulgentes ante las malas prácticas que llevan a cabo para compensar su estado emocional). Y además, por su interés en la imagen y su autoexigencia, pueden sufrir trastornos alimentarios.

ENEATIPO 4 SOCIAL

Como todo E4, también los eneatipo 4 social están determinados por una fuerte sensibilidad, una mala autoimagen, y la envidia derivada de su incapacidad de poder conformarse con sus carencias como resultado del pésimo concepto que tienen de sí mismos (y que les lleva a compararse con los demás, sintiéndose perdedores ante lo que a los otros les hace aparentemente felices y ellos no poseen). Pero como subtipos sociales que son, enfocan su envidia e hipersensibilidad en el ámbito social, anhelando pertenecer a un grupo glamuroso, pero sintiéndose sin embargo incapaces de pertenecer al mismo por el sentimiento de desvalorización que tanto caracteriza a este patrón de personalidad y que en ellos se acentúa más que en los demás, siendo de los tres subtipos del E4, los que peor autoimagen tienen de sí mismos.

Los eneatipo 4 social están fuertemente determinados por una imagen idealizada en negativo de su propio ser. Consideran que son defectuosos y que nadie les amará ni valorará por ello, y la desvalorización está hasta tal punto en la base de su carácter, que llegan incluso a despreciar a quienes les dan valor, por lo que tienden a idealizar mucho a los demás, comparándose con ellos y sintiéndose inferiores e insignificantes, y con la sensación de vacío de que algo les falta y que nunca podrán alcanzar. Y la envidia se manifiesta en ellos como vergüenza de ser.

Se les denomina de hecho “vergüenza”, por el sentimiento de culpa y vergüenza que experimentan por ser como son. Temen que no serán aceptados siendo ellos mismos, y ante la dependencia afectiva que los caracteriza (pues requieren de la aprobación de los demás para sentirse dignos y queridos), reaccionan reprimiéndose, lo que les genera un sentimiento de insatisfacción tan insaciable, que les lleva a caer fácilmente en un estado de autoculpa y desesperanza y a dejar de luchar, siendo los “sufridores” por excelencia de los tres subtipos de este patrón de personalidad (en contraposición al “sufrido” conservador, que lucha por mejorarse y afrontar los problemas), y los más masoquistas del eneagrama tras el E9.

Atrapados en una situación que según ellos no tiene solución, y sin atreverse a pedir (debido a su timidez y marcado sentimiento de inferioridad), los subtipo social se distinguen de los otros dos, por quedarse en el sufrimiento sin admitir mejoras, y por adoptar (sin ser sinceros) el papel de víctima para reclamar atención. Se lamentan y se regodean en su dolor, y manipulan desde la pena para hacerse querer, hasta el punto de sumergirse en un círculo vicioso donde tienen que estar mal para conseguir de los otros lo que quieren, y pudiendo incluso llegar a enfermar para que los compadezcan.

Los eneatipo 4 social, son románticos, muy sensibles a las críticas, y los más emocionales y extrovertidos del E4, y les gusta mostrar su sentido de la estética, pero temen que los demás no los acepten, por lo que tienden a ocultar sus sentimientos de inadecuación social y a relacionarse tras una máscara más alegre y optimista de cómo realmente se sienten (o se aíslan, o se unen a los que aparentan estar excluidos, pudiendo incluso tener dificultades para mantener un puesto de trabajo por su tendencia a sentirse al margen y a construir una relación de soledad entre sus compañeros). Y en ocasiones, pueden fantasear con ser rechazados sin que nadie se haya pronunciado al respecto, y mostrar una actitud hostil como defensa preventiva, o ser muy autocríticos y sentir vergüenza por considerar que se desvían de los estándares del grupo al que quieren pertenecer.

En un estado de mayor equilibrio respecto a su neura, son generosos y se preocupan por el bienestar del grupo y de las personas cercanas, y pueden desarrollar excelentes habilidades sociales gracias a su gran intuición y sensibilidad, o tener la suficiente autoestima para sentirse parte del grupo e interactuar amablemente con él, pero sin dejarse llevar por el mismo. Pero presas de su neura, pueden acabar sometidos a su hipersensibilidad frente a las críticas, y dejar de hacer cosas por miedo a ser humillados o rechazados, o aislarse o volverse antisociales. Y acostumbran a sufrir una fuerte tensión entre querer encajar para ser aceptados y ser especiales y únicos, pudiendo reforzar su imagen con un look extremo.

ENEATIPO 4 SEXUAL

El eneatipo 4 sexual se caracteriza porque frente a la desvalorización que siente respecto a sí mismo, tiende a proyectar enérgicamente la culpa de su malestar al exterior, adoptando un papel de víctima agresiva y exigente, y con una interacción fuertemente competitiva, y se le denomina precisamente “odio”, porque transforma la vergüenza que experimenta frente a sus propios deseos en culpa, odio y resentimiento.

Orientado hacia la acción y con mucha fuerza, el eneatipo 4 sexual parte como todo E4, de la envidia o pasión por compararse con los demás ante la incapacidad de asumir sus propias carencias (revisando lo que a los otros les hace aparentemente felices y él no posee), pero la transforma en un afán por competir, a fin de destacar y obtener el reconocimiento ajeno, y para sentirse igual o superior a los demás. Es muy competitivo. La competitividad impregna todos los ámbitos de su vida, incluido el profesional, pero no compite para ganar, pues mediatizado por una envidia desafiante y retadora, y desde la posición de quien por dentro piensa que no vale nada, pero por fuera desprecia al otro, es incapaz de disfrutar de sus éxitos sin degradar los logros de los demás, y se centra en hacer perder, en derrotar y humillar al otro, cortando cabezas, o invalidando, despreciando y desvalorizando al fin, lo que en realidad desea, haciéndolo también en la intimidad.

El eneatipo 4 sexual es muy romántico. Requiere del amor del otro para sentirse digno, y busca a alguien que le rescate de su infelicidad en un mundo en el que no se siente visto o entendido, por lo que da gran importancia a la parte amorosa de su vida (creyendo que la vida no tiene sentido sin la persona que ama y que encontrando el amor perfecto será feliz), e invierte gran cantidad de energía en cultivar una intimidad profunda con la persona que desea. Pero enfoca su envidia e hipersensibilidad en el ámbito de sus relaciones más íntimas, y tiende a competir con ellas y a aniquilar al otro en la intimidad. Y además es muy polar. Experimenta grandes cambios sentimentales, y cultiva relaciones de amor-odio en las que pasa de idealizar a su pareja, a enfadarse con ella por sus defectos cuando la deja de idealizar, por lo que puede ser muy sensual, seductor, sexual y cálido, pero también desagradable, posesivo y celoso, y acostumbra a tener relaciones afectivas o sexuales complicadas, en las que se puede encaprichar de alguien a quien apenas conoce, o sentirse atraído por una persona solo porque posee cualidades que a él le faltan (y siendo también frecuente en su caso, la envidia y rivalidad con el sexo opuesto).

Muy intenso y semejante a un E8, la culpa es su razón de vivir, y es muy expresivo respecto a su enfado. Acostumbra a ser consciente de sus estados emocionales, y siente que merece más de lo que se le da, y ante la frustración y la carencia que experimenta, protesta y reclama de forma intensa, agresiva, exigente y dramática (con la convicción de que obtiene más, quien más se queja), y lucha contra la vergüenza mediante una actitud desafiante y descarada y con un cierto exhibicionismo, por lo que puede adoptar la posición arrogante de quien se pone por encima para salvar al otro, y buscar frecuentemente trabajos y actividades para ayudar a personas desfavorecidas, con los que sentirse útil y más importante. Pero se vuelve insistentes y muy demandante, y puede llegar a ser tan molesto (siendo de hecho, el insufrible del E4), que logra fácilmente que el otro lo abandone, estableciendo así un círculo vicioso que confirma sus temores, en el que el rechazo lleva a la protesta, y viceversa.

En un estado de equilibrio, es capaz de ser extremadamente abierto de corazón, compasivo y amoroso hacia todos, de admirar y amar profundamente a su pareja aceptando su singularidad, y de comprometerse profundamente con las personas de forma auténtica y apasionada. Y puede desarrollar excelentes habilidades de comunicación y relaciones interpersonales. Pero presa de su neura, puede anhelar una pareja imposible (creyendo que es la única que puede darle el amor que necesita), o idealizar a su pareja poniendo unas espectativas tan altas que no se cumplirán y darán pie al enfado. Y puede ser excesivamente competitivo (sobre todo en temas románticos), o ante los problemas, volver el odio hacia sí mismo de manera autodestructiva, y abusar de drogas o o ponerse en situaciones de riesgo.

ALAS DEL ENEATIPO 4

Las alas de la personalidad según el Eneagrama tradicional son los dos números a cada lado de nuestro eneatipo principal. Tradicionalmente se ha enseñado que tenemos una predominante, la cual tiene una influencia especial sobre nosotros complementando o “condimentando” nuestra personalidad.

ENEATIPO 4 ALA 3: EL ARISTÓCRATA

Este subtipo es muy interesante, ya que el 3 aporta dinamismo al estilo introvertido de los 4. El ritmo de los Tres, hace que esta combinación prospere, puesto que pueden ser muy sabios y sacar todo su potencial, la mayoría de las veces reservado a los campos interiores. Al tener más confianza en el afuera pueden ejecutar grandes cambios. Su principal reto es conectar su potencial con la acción.

Esta gran combinación amplía los campos del tipo básico y lo conecta con la realidad. Si ya has leído sobre el 4 del Eneagrama, habrás visto que son personas muy introvertidas, con un mundo interior increíble que rara vez comparten con los demás. Pero la influencia de los 3 viene a salvar su potencial del silencio, dando al mundo la oportunidad de verlo. 

Siguen formando parte de la misma tripulación: la Tríada de los Sentimientos, lo que significa que la mayoría del tiempo se ocupan de sus emociones. Estos son el motor de sus acciones y el fuego de sus decisiones. El corazón está al mando. Sin embargo, el tipo de Eneagrama 4a3 puede ser malinterpretado como parte de La Tríada de la Cabeza debido a su capacidad para descubrir cosas nuevas, resolver misterios y problemas, y por su constante sed de conocimiento. Al pasar tanto tiempo en su interior, desarrollan una increíble creatividad, aunque su inseguridad les impide reconocerla. Los 4a3 se sienten más seguros atesorando todos sus pensamientos como si fueran una Gema del Alma. No corren demasiados riesgos, cuanto menos se expongan, más cómodos se sentirán. El principal reto al que se enfrentan los 4a3 es desprenderse de sus ondas de sentimientos y encontrar su propia identidad más allá de ellas. 

ENEATIPO 4 ALA 5: EL BOHEMIO

Este subtipo es el intenso, con ojo de artista. Es más introvertido, por eso pasa más tiempo retirándose a su interior y observando el mundo desde allí. Así es el modo por el cual extraen la esencia de una cosa. Como buscan la seguridad, este ojo analítico les hace comprender mejor el entorno y les permite moverse con más confianza. Es importante que aprendan a crear vínculos con la gente y a canalizar su intensidad.

Con más confianza en sí mismos, se lanzan a su propio universo para descubrir cosas increíbles ocultas en una fachada de sencillez. Donde las personas normales ven acontecimientos comunes, ellos se plantean nuevas preguntas. A medida que los límites se amplían, también lo hace su curiosidad. No hay nada imposible para el hambre de los 4a5. 

El tipo 4 cruzado con el 5 es muy interesante, ya que no forman parte de la misma Tríada. Los 5 son miembros de la Tríada de la Cabeza, o de los Pensamientos, mientras que los 4 son de la Tríada del Corazón. Así, en la interacción de ambas descubrimos que la introversión se agudiza aún más. Por ello, no se preocupan de cómo les ve la gente o de saber adaptarse a diferentes entornos. Solo se centran en abrir nuevas puertas y respirar el aire del progreso. La clave para conseguirlo es confiar en los susurros de la percepción, que llevará a los 4a5 a hacer las preguntas correctas. Lo único que les queda es estar en sintonía interna y encontrar lo más increíble en lo que deben convertirse en expertos: ellos mismos. 

INTEGRACION Y DESINTEGRACION DEL ENEATIPO 4: los movimientos constantes de crecimiento (integración) y estrés (desintegración)

EL 4 CUANDO SE MUEVE HACIA EL 1

DE FORMA SANA (en crecimiento)

Cuando el Eneatipo 4 adquiere las características de su flecha al Eneatipo 1 de forma sana, se aprecian características como la objetividad y el pragmatismo, sin tomarse cuestiones ajenas de forma tan personal. Dejan de lado el relativismo constante por un enfoque más objetivo y utilitarista, así como la precisión que del Eneatipo 1 adquiere.

Una de las características que puede llegar a tener el Eneatipo 4 es el relativismo moral y reflexión por la realidad, vinculándolo con su mundo emocional, por ello, este eneatipo encuentra en su flecha al Eneatipo 1 un enfoque de vida pragmático, donde sus emociones no toman tanto protagonismo en sus acciones, domina su mente. Por tanto, aprende a realizar juicios imparciales sin que la emocionalidad juegue tanto peso.

DE FORMA INSANA (en stress)

En esta fase, el Eneatipo 4 combina una serie de emociones tales como rabia, ira, envidia hacia otras personas, vinculada con una rigidez mental que no permite encontrar alternativas a situaciones de conflicto dadas con otras personas, creyendo tener la verdad y la razón constantemente.

El Eneatipo 4 en esta fase se encuentra en una actitud de perfeccionismo inflexible, unido a su arrogancia “yo soy el único que lo hace bien”, que al mismo tiempo combina con su crítica hacia todas las personas y hacia uno mismo.

También, no asumirán la culpa fácilmente ante un fracaso grupal y podría ponerse en una actitud moralista, por ejemplo: “salió mal porque no hicisteis bien…”.

EL 4 CUANDO SE MUEVE HACIA EL 2

DE FORMA SANA (en crecimiento)

Cuando el Eneatipo 4 adquiere las características de su flecha al Eneatipo 2 de forma sana, deja de lado la exigencia y egocentrismo para enfocarse en los demás a través de la empatía y la escucha activa, centrándose en el otro, por su bienestar, sin importarle perder protagonismo.

La envidia, característica del Eneatipo 4 en estados insanos, queda de lado, pasando a ver bien al otro, a sentirse bien por ello.

Además, la confusión del Eneatipo 4 de creer tener una “intuición” desarrollada (siendo estos juicios), para a un estado reflexivo previo a realizar una afirmación sobre las demás personas.

DE FORMA INSANA (en stress)

En esta posición, el Eneatipo 4 puede caer en dependencia emocional, vinculado su bienestar con el de la pareja. También pueden estar en situaciones de orgullo fuertes que van cambiando con su baja autoestima.

Su egoísmo intenta compensarlo realizando buenas acciones hacia otras personas, pero en realidad lo hace con el fin de obtener atención, no por un buenismo genuino.

Además, al encontrar dificultad en la gestión de sus emociones, pueden tender a pensar que contando situaciones de desgracia en su vida, encontrarán en las demás personas atención y afecto, obteniendo en realidad el efecto contrario.

¿CÓMO SE RELACIONA A NIVEL PAREJA EL ENEATIPO 4 CON EL RESTO DE ENEATIPOS?